Los precios mundiales de la carne porcino bajaron ligeramente en Enero.

Los precios mundiales de la carne porcino bajaron ligeramente en Enero.

Los precios mundiales de la carne de cerdo bajaron ligeramente en enero debido a la abundante oferta de animales sacrificio y a unas importaciones de China inferiores a las previstas.

El índice de precios de la carne de la FAO se situó en enero en un promedio de 113,6 puntos, lo que supone una ligera disminución (de 0,1 puntos y un 0,1 %) respecto de diciembre, con lo que continuó su descenso por séptimo mes consecutivo, pero aun así se mantuvo 1,5 puntos (un 1,3 %) por encima de su nivel de hace un año. La bajada de los precios mundiales de las carnes de aves de corral, bovino y cerdo explica el descenso del índice en enero.
Los precios mundiales de la carne de aves de corral siguieron disminuyendo debido a que las disponibilidades exportables a escala mundial procedentes de los principales proveedores siguieron siendo superiores a la demanda de importaciones, pese a los brotes generalizados de gripe aviar. Por otra parte, los precios de la carne de cerdo disminuyeron ligeramente a causa de la abundante oferta de cerdos para beneficio, especialmente en el Brasil y en los Estados Unidos de América, y debido a que las importaciones de China previas a la Fiesta de la Primavera fueron menores de lo previsto. Del mismo modo, descendieron los precios internacionales de la carne de bovino, a raíz del aumento de la oferta de ganado listo para el beneficio, principalmente en Oceanía. Por el contrario, los precios de la carne de ovino subieron a causa del aumento de la demanda de importaciones, a pesar del incremento de los volúmenes de matanza en Australia.
La invernada se despertó de una larga siesta y mostró incrementos del 30%

La invernada se despertó de una larga siesta y mostró incrementos del 30%

Después de casi un año de precios en baja para la hacienda de invernada sintiendo el impacto de la sequía y los ingresos de los argentinos, en febrero se despertó y estableció valores en consonancia con los aumentos en el Mercado de Cañuela, indicaron desde el Rosgan.

En enero ya se notó que se había tocado el piso y existía tendencia a subir, pero recién en este mes se confirmó que la hacienda tenía un recorrido al alza después de perder durante el 2022 contra la inflación más de 50 puntos porcentuales, la carne era el producto más barato en la canasta alimenticia y solamente una sequía histórica podía causar tantos quebrantos por la ausencia de pasto en los campos.

Si bien no ha llovido pasto las desiguales caídas de agua ocurridas durante parte de enero, junto a pronósticos de todos los especialista que empezamos a salir de tres años del efecto Niña, generaron una expectativa que solamente necesitaba corroborarse con las menores ofertas de gordo en la venta directa y dejaron al mercado de referencia, Cañuelas, con toda la oferta disponible para una demanda insatisfecha, no porque aumentaron los ingresos en el bolsillo sino porque se fueron vaciando los feedlots y la restricción de oferta actuó como un disparador produciendo aumentos largamente esperado por los productores.

Todas las categorías mostraron incrementos cercanos al 30 % encontrando una demanda que pujó para hacerse de los lotes, todos los actores invernadores tradicionales y feedloteros le dieron consistencia a valores que llegaron para quedarse. La ganadería hoy tiene un nuevo piso y solamente se espera que las lluvias vayan regresando a las zonas más castigadas, la invernada se despertó de una larga siesta acompañando al animal gordo, hasta donde lleguen los precios estará marcado por el consumidor si puede convalidar los nuevos valores.

Los precios promedios de las categorías en este remate 8 y 9 de Febrero de ROSGAN 166 fueron:

Terneros $501.87
Terneros/as $468.45
Terneras $443.06
Novillitos $424.97
Novillos $380.31
Vaquillonas $398.07
Nov. Y Vaq.  $407.18
Vaca de invernada $284.61
Ternero Holando $329.76
Novillitos  Holando $295.77

 

Fuente: https://www.todoagro.com.ar/

El consumo de carne de cerdo se acerca a los 21 kilos por habitante/año

El consumo de carne de cerdo se acerca a los 21 kilos por habitante/año

Luego de un semestre bravo donde el novillo estuvo planchado y el capón lo igualó en las pizarras, las cosas parecen acomodarse y surge con ello la posibilidad de otro salto para la carne de cerdo. El consumo sigue firme.

Una corrección sobre la hora, referida al consumo de carne porcina en Argentina señala que el consumo promedio se acerca a los 21 kilos.  Para ser precisos: 20,77 kilos por habitante/año.

Luego de las cifras sobre población que arrojó el Censo (¡somos 46 millones!) divido por el consumo anual nos arroja este alentador registro. Y tengamos en cuenta que los últimos meses del año pasado ofertaron un precio del novillo que se mantuvo apareado a la cotización del capón, escenario que ha comenzado a revertirse para buscar la diferencia histórica, azuzado por el impacto de la sequía y devenida de ella el incremento de los costos de alimentación ganadera.

En el cuadro, se adjuntan valores de referencia de la media res porcina, hoy en día con diferencias con la media res vacuna de 39% más barato. “Volvimos a ser opción para los consumidores”, señalan desde JLU Consultora, y a partir de ello se abren expectativas interesantes para la carne fresca de cerdo (siempre y cuando esa demanda extra no sea asistida por cortes desde Brasil).

Los números buenos tienen sus razones

Son múltiples y diversas las razones por las que el consumidor viene integrando a su mesa la carne porcina si bien desde siempre las facturas de cerdo integraron el paisaje alimentario criollo. Hace poco más de una década los cortes cárnicos de cerdo comienzan a tener una participación creciente en la elección diaria de proteína animal por parte de un consumidor fino, y muy leal a las bondades que despliega la carne vacuna.

El analista Juan Luis Uccelli socializa desde hace muchos años el pulso del sector con una mirada que no se queda en los costos intramuros de las granjas para asumir observaciones más completas, que no pierden de vista las medidas de los gobiernos o el ingreso de los consumidores.

No podrían haberse alcanzado estos números sin una cadena de abastecimiento en cantidad y calidad que recibieron inversiones muy importantes en estos últimos años, tanto en infraestructura de producción, genética, manejo y una logística aceitada para llegar cada día, con la mayor calidad, a los mostradores y góndolas que cada año se multiplican.

Con este salto de consumo, la carne de cerdo se desarropa de su vestimenta de “carne sustituta” para jugar de titular, en las grandes ligas, sustentada en sus propios méritos y construyendo un prometedor futuro.

Los desafíos por venir

El cerdo, amén de las virtudes conocidas, tiene una adicional: admite todas las escalas, incluyendo a integrantes de la agricultura familiar que ingresan y salen del negocio a partir de una lógica casera; a complejos industriales con miles de madres, tecnología, manejo de desperdicios que, en muchos casos son engranajes de una economía circular. Por todo ello se necesitan conocer el sector, registrar a los miles de porcicultores y promover reglas proactivas para cada emprendedor, con normativas especiales para cada caso, como propone en cada charla el especialista de Inta Marcos Juárez Jorge Brunori.

Es importante también no cejar en la mejora genética permanente, en la reducción de antibióticos, en la capacitación de una mano de obra que porte las habilidades y destrezas que requieren el futuro inmediato.

Es necesario además alentar inversiones en industria frigorífica para que la logística y el transporte no se lleven el esfuerzo en eficiencia del resto de la cadena.

Y por último, nuestro principal activo, que nos dará una posición determinante para asistir a un mercado mundial demandante: el estatus sanitario. En este sentido, Argentina tiene una ventaja competitiva determinante en un mundo productivo azotado por enfermedades varias (PRRS, PPA, Aujeszky y otras del universo digestivo y respiratorio). En este sentido, parecen muy atinadas las medidas asumidas en torno a vigilar el ingreso de ejemplares sin estudio previo y cuarentena.

Los hechos parecen apuntalar que el sector debe crecer sin inversiones de shock que desoigan el know how propio de nuestra experiencia; aunque la vacilante inversión local no parece apostar un pleno a una producción criolla que desaliente los cantos de sirena que llegaban de Oriente. Veremos.

 

Fuente: https://www.todoagro.com.ar/

Logros S.A. realiza su primera exportación de carne Kosher a Israel generando 100 empleos

Logros S.A. realiza su primera exportación de carne Kosher a Israel generando 100 empleos

  • El frigorífico ubicado en la localidad de Río Segundo, envía este lunes el primer camión contenedor con 25.917 kilos.
  • Tras una inversión por 2,5 millones de dólares para adecuar la línea de faena.
  • Generando 100 empleos directos e indirectos nuevos que se suman a los más de 600 puestos de trabajos directos y más 1.000 indirectos.

 

El ministro de Industria, Comercio y Minería, Eduardo Accastello, junto al ministro de Agricultura y Ganadería, Sergio Busso; visitaron este lunes, las instalaciones del Frigorífico Logros S.A ubicado en Río Segundo; que hoy envía 25.917 kilos  de carne Kosher a Israel, onvirtiéndose en el primer frigorífico de Córdoba en obtener la certificación por parte del rito judío

 

A tal fin, realizaron una inversión de 2,5 millones de dólares para la adecuación tecnológica requeridas para el proceso, incorporando 100 empleos directos e indirectos, que se suman a los más 600 puestos de trabajo directos y más de 1.000 indirectos que generan en la zona.

 

Al hacer uso de la palabra, el ministro Eduardo Accastello expreso: *El Trabajo mancomunado del sector  privado y el sector público permitió que Córdoba haya crecido en materia industrial en los últimos 30 meses, a pesar de la pandemia”.

 

“Las inversiones que realizan los empresarios cordobeses, generan empleo genuino en nuestra Provincia, por eso la importancia de trabajar juntos teniendo como objetivo la internacionalización de las PyMEs cordobesas y para eso, tenemos que lograr mayor competitividad”, señaló y agregó que en este sentido, el gobernador Schiaretti anunció la creación de  la Agencia de Competitividad Córdoba que va a estar conducida por el sector privado como la Agencia ProCórdoba, que va a contar con el apoyo del Estado.

 

Por su parte, el ministro Sergio Busso destacó el esfuerzo y la inversión realizada por la empresa familiar, que significó más de 2.5 millones de dólares para adecuar toda una línea de faena. «Es una importante inversión que no sólo representará unos 100 nuevos puestos de trabajo para la región, sino que además apuesta la producción y el status sanitario de Córdoba».

 

En tanto, Mariano Grimaldi, uno de los propietarios de Logros S.A., señaló que la primera exportación de carne Kosher «es un viejo anhelo en el que trabajamos mucho tiempo, le pusimos mucho esfuerzo y destinamos recursos  económicos e incorporamos tecnología”.

Luego agradeció el apoyo del Gobierno Provincial y dijo: «Hoy cargamos el primer contenedor de carne Kosher, estamos muy contentos porque fue toda una experiencia porque aprendimos mucho”.

 

La carne Kosher debe ser preparada y faenada  conforme las normas judías, a fin de ser consumida por esta comunidad.

En este sentido, el rabino Marcelo Polakoff explicó que “lleva un tratamiento especial en el faenamiento de acuerdo al principio judío del menor sufrimiento del animal”.

 

 También estuvieron presentes, el secretario de Industria, Fernando Sibilla; la secretaria Ganadería, Catalina Boetto; el legislador Provincial, Francisco Fortuna; el intendente de Río Segundo, Darío Chesta;  el Vicepresidente del Instituto de la Promoción de la Carne Vacuna Argentina -IPCVA-, Daniel Urcía; y  representantes de SENASA.

 

Cultivos de servicios y ganadería en el sudeste bonaerense

Cultivos de servicios y ganadería en el sudeste bonaerense

¿Cuáles son los costos de hacer un cultivo de servicios (CS) con aprovechamiento ganadero en el sudeste bonaerense? ¿Qué beneficios y resultados productivos se pueden obtener? Esas fueron algunas de las preguntas que motivaron a los productores de la Regional Juan Manuel Fangio (JMF) de Aapresid a buscar respuestas en sus sistemas predominantemente ganaderos. Las mismas fueron presentadas en la última jornada «Un Productor en Acción» liderada por la Regional en Balcarce

En la zona, los CS aparecieron como alternativa para ambientes donde no entra un cultivo de fina y como estrategia para hacer frente a malezas difíciles. Sin embargo, un relevamiento de la Regional JMF reveló que la mayoría de los productores en la zona hace un aprovechamiento ganadero de los CS. “En general optan por gramíneas o leguminosas puras que tienen como antecesor al trigo, girasol y en menor proporción maíz, y luego van a maíz tardío”, detalló el asesor Hugo González.

De acuerdo a José Luzuriaga (de la firma socia de Aapresid Horreos del Sudeste), “en una zona netamente ganadera, uno de los principales objetivos de incluir CS es encontrar la complementariedad entre agricultura y ganadería. Cubrir el bache de producción de forraje de invierno es fundamental en sistemas de ciclo completo y posibilitan alta cantidad y calidad de forraje”.

CS: sinergia entre “agricultor” y “ganadero”

Luzuriaga, agrega que “el caso de Horreos del Sudeste es particularmente atractivo porque el 100% de la superficie que siembra es en campos de terceros, y a pesar de ésto logran convenios con los dueños para convivir en una verdadera sinergia: con los CS de doble propósito, el dueño ve aumentada su capacidad de carga (por lo general invernada) o por lo menos asegura calidad y cantidad; y el inquilino agricultor disminuye probabilidad de enmalezamiento, aumenta posibilidad de fijación biológica de N, la capacidad de almacenaje de agua, etc. gracias a los CS”.

En cuanto al manejo, el primer factor que cuidan a la hora de sumar CS es el consumo de agua. Dependiendo del balance hídrico de la campaña, los CS se suelen dar de baja en torno al 15 de octubre para dar lugar a la siembra de maíz un mes después. 

Asimismo, una adecuada elección de especies les permite achicar la inmovilización de nutrientes: mientras que el raigrás y la avena añaden cobertura perdurable, las leguminosas aportan N rápidamente disponible. “La vicia va bien en las lomas y el trébol persa es un caballito de batalla en ambientes más anegables y/o salinos”, indicó. La mezcla de trébol persa y raigrás diploide, con la supresión de este último en septiembre, permite que la leguminosa gane terreno, para maximizar sus beneficios. En el caso de CS de gramínea pura, hacen fertilización variable incorporada pre siembra “para salvar este sándwich de inmovilización”, precisó. 

Manejo del pastoreo

El manejo del pastoreo es crucial para asegurar buen rebrote y minimizar el efecto del pisoteo. En el planteo de Luzuriaga, los animales entran en julio-agosto con 2000-4000 kg de materia verde de alta calidad. “La idea es mantener un pastoreo liviano y dejar un remanente de 1500 kg para asegurar un repunte rápido”. La presión de insectos como babosas, bichos bolita y cortadoras que proliferan con los CS, hace que soja y girasol no sean los sucesores más recomendados.

Estas experiencias arrojan números muy alentadores: “con buen manejo, entre 30 y 80 kg de carne cubren los costos del CS, incluso si fuera necesario usar herbicidas”. Es decir que en dos meses, con una ganancia de peso vivo diaria normal, enseguida se recuperan los costos, sin contar otros beneficios como reducción del impacto ambiental, ahorro en insumos como fertilizantes y herbicidas

Con buen manejo, el aprovechamiento ganadero no afecta el rol de los CS en agricultura: evaluaciones en zona Madariaga mostraron que CS de trébol persa y raigrás produjeron 50% menos de biomasa cuando tuvieron aprovechamiento ganadero y, aún así, mostraron buen control de malezas y similar aporte de nitrógeno (N) que CS sin pastorear. Además, los beneficios de integrar CS a la cadena forrajera se tradujeron en más kg de carne.

Cuidemos el medio ambiente: ¡Sigamos comiendo hamburguesas!

Cuidemos el medio ambiente: ¡Sigamos comiendo hamburguesas!

En el Foro de Davos 2023 se volvió a atacar el consumo de carne, recomendando comer solo dos hamburguesas por semana para “salvar” el planeta, desconociendo que sistemas productivos como el de la Argentina no sólo no afectan el medio ambiente sino que son una gran herramienta para la “regeneración” natural de los ecosistemas.

 

La ganadería es muy criticada en las últimas décadas. Se la culpa de ser una de las causantes del cambio climático y calentamiento global. Y esto se repitió en el último Foro Económico Mundial en Davos (Suiza), realizado entre el 17 y 20 de enero 2023.

Allí se recomendó no comer más de dos hamburguesas (finitas) por semana para “salvar” al planeta del cambio climático. Pero lo que no dijeron es que esta crítica hacia la ganadería y el consumo de carne se da en un contexto de crecimiento y desarrollo de la producción industrial mundial derivada de la quema de combustibles fósiles de las últimas décadas.
Vayamos por partes: La mayoría de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) provienen de la actividad industrial, como la electricidad, la manufactura, la construcción y el transporte. Este tipo de producción, al basarse en la quema de combustibles fósiles, genera cambios en el medio
ambiente. Esto se da, a grandes rasgos, porque el dióxido de carbono producido por la industria permanece en la atmósfera por varios años y se acumula a lo largo de los siglos. Es el principal impulsor del calentamiento global y cambio climático.
¿Pero una producción ganadera como la de nuestro país qué tiene que ver con
el crecimiento de la producción industrial derivada de la quema de combustibles
fósiles? ¡Nada! La ganadería argentina se basa en una producción extensiva.
¿Qué quiere decir eso? Que nuestra producción de carne consiste principalmente en alimentar a las “vacas” con pasturas y pastos naturales, diferenciándose de muchos de los productores de carne vacuna del mundo.
Las vacas en la Argentina son parte del ecosistema natural. Participan del ciclo
natural del carbono a través de la fotosíntesis.
Y la historia comienza así: Las vacas se alimentan a través del consumo de pasturas y pastos naturales. Estos pastos y pasturas naturales han tomado del aire el carbono como parte del ecosistema natural a través de la fotosíntesis.
Las vacas digieren el carbono y el pasto eliminando metano a la atmósfera. El metano que emiten los animales esta “hecho” en base al carbono del pasto que las vacas consumieron y tiene una duración de entre 10 a 12 años en la atmósfera. Luego de ese tiempo, el metano se transforma en agua y dióxido de carbono, que es absorbido naturalmente a través de la fotosíntesis por las pasturas. Y es así como el ciclo se repite una y otra vez. Es el ciclo natural de la naturaleza. La ganadería argentina es parte de un proceso de secuestro de dióxido de carbono hacia la tierra.
Lo más importante es que las vacas no están generando más carbono a la atmósfera, sino que a través de la fotosíntesis y su alimentación contribuyen al ciclo natural del carbono, transformando proteína vegetal no apta para el consumo humano en proteína animal de alto valor biológico, apta para el consumo humano. Por lo tanto, no hay nada nuevo generado por la ganadería más que proteína animal de primera calidad para la población del mundo. Por eso, la recomendación del Foro de Davos, no comer más de dos hamburguesas (finitas) por semana para “salvar” al planeta del cambio climático es una “fake news” en nuestro país.
¿Se puede seguir culpando a la ganadería argentina como una de las causantes del calentamiento global? No. Es muy importante apoyar y apostar como país a la producción ganadera porque tiene un papel preponderante y fundamental en el ciclo natural de la naturaleza y su regeneración. Por todos: el planeta, los animales y los humanos.

¡Sigamos consumiendo hamburguesas que la carne producida con sustentabilidad no es la culpable sino una gran herramienta para la regeneración de este planeta en que habitamos!