Un trabajo realizado por técnicos de grupos CREA destacó que el actual contexto macroeconómico genera cierta tensión y dudas desde hace un par de semanas cuando la brecha de la cotización de la divisa americana superó el 50% a la cotización del dólar oficial, aun cuando el Congreso aprobó la Ley Bases enviada por el Ejecutivo.
En ese contexto, “el Gobierno confirmó su ritmo de devaluación y aseguró la continuidad del híbrido “dólar blend”, que permite que el 20% de las divisas ingresadas por exportaciones puedan liquidarse en el mercado de contado con liquidación”.
El documento añade que “los anuncios más destacados por el Gobierno Nacional de estas últimas semanas vinieron desde lo monetario, con un pasaje de pasivos desde el Banco Central al Tesoro a cambio de certificados a los tenedores de esas acreencias, en su mayoría bancos e instituciones del sector financiero. Con ello se busca reducir la emisión que, en su parte esencial, estaba destinada a honrar intereses de esas colocaciones”.
Respecto a las medidas más relacionadas con el sector agropecuario, CREA destaca que “se prevé un incremento en la tasa de interés de los créditos con el consiguiente impacto en los costos de financiamiento, de todos modos habrá que analizar los registros que implementará la Administración Central respecto al costo del dinero”.
CREA caracteriza como compleja a la herencia recibida por el actual Gobierno y apoya las decisiones asumidas en el plano fiscal y monetario, pero estiman que en la política cambiaria la devaluación mensual (crawling peg) implica un retraso respecto a la valuación que hoy tiene la moneda americana, y por lo tanto, al incrementarse la brecha entre el dólar oficial y los negociados en las mesas libres alejan la posibilidad de salida de los cepos cambiarios heredados.